La persistencia de la memoria (1931)

El artista español Salvador Dalí, pintor, escultor, dibujante, artista gráfico y diseñador, es uno de los grandes representantes de la pintura surrealista, representativa del mundo del inconsciente y de los sueños. Dalí no pinta los objetos tal como los vemos, sino que los deforma de acuerdo a las ideas que asocia con ellos.

“La persistencia de la memoria” es una obra clásica del pintor. En un paisaje onírico, es decir, del mundo de los sueños, Dalí representa varios relojes, pero no relojes como los vemos en el mundo real, sino relojes blandos. Tal vez al pintarlos de esta manera el artista quiso expresar la posibilidad de controlar el tiempo, como si desfigurando los instrumentos pudiéramos escapar al inexorable paso del tiempo. En el cuadro se puede observar también un rostro híbrido, con algo de pájaro y algo de humano, el cual tiene encima uno de esos relojes blandos como si estuviera atrapado por él, sin poder librarse de su control. A la izquierda se observa un reloj cerrado y, encima, partículas que podrían representar restos de objetos descompuestos, lo que se puede interpretar como la imposibilidad de detener al tiempo, lo que implica la ineludible llegada de la muerte con la consiguiente descomposición del cuerpo…