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Período artístico que surge en Francia y se desarrolla durante los el siglo XII hasta la llegada del Renacimiento el siglo XV en Italia, y hasta el XVI en otra partes de Europa Occidental. Las obras de este tiempo -tanto pictóricas como escultóricas- representaban figuras o escenas cristianas, y las más destacadas de ellas son las que entregan en el espectador un aliento para la meditación, tal como se lograba con las miniaturas portátiles con motivos religiosos para generar una oración en privado.

Este período se caracterizaba por el diseño y construcción de elevadas y peculariares catedrales, en donde primaba en una ligera arquitectura. Sus elementos esenciales eran el arco puntado, la bóveda de crucería y el uso de luz natural, que al entrar por la vidrería del edificio alcanzaba un color que transformaba el espacio simbólico al interior del templo, generando una experiencia espiritual al creyentes y visitantes de estas iglesias.[/column]